miércoles, 26 de octubre de 2016

Lo estás mal acostumbrando....

Hoy queremos empezar el post con una pregunta indiscreta: ¿cuántos y cuantas de vosotros y vosotras habéis sido invadidos con la afirmación sagrada de "lo estás acostumbrando a los brazos"?
Si la respuesta es un sí rotundo, bienvenidos al club de los malacostumbradores (uuuueeeee).

Y es que contestad sinceramente, ¿a quién no le gusta que después de estar cansado de caminar alguien lo lleve en brazos? ¿Quién no desearía tener una mochila voladora que lo llevara a todas partes sin tener que dar ni un paso? Y a colación de esto, ¿alguien piensa que por ir, no más de 15 o 20 minutos montados ahí, se le va a olvidar caminar, o no va a querer hacerlo nunca más? ¿Se nos ha olvidado como se anda desde que tenemos coche? Vale, bien, pues si la inmensa mayoría de la población entiende esto, ¿por qué nos cuesta tanto comprender que un bebé quiera ir en brazos? Lo pilláis verdad? Si es que sois muy listos.

Desde tiempos inmemoriales, ya en el Edén, los monos llevaban a sus crias enganchados en sus espalditas. Los canguros en su panzita. Cuantas imágenes de mujeres trabajando en los campos con sus hijos a la espalda envueltos en un fular. Cuantas veces nos paramos en un puesto de artesanía y le decimos a la mujer que amablemente nos atiende "mira que a gustito el bebé ahí dentro metido". Pero hacerlo nosotros???? jamás!! No vaya a ser que la vecina del 5º me salga con la frasecita de que voy a malacostumbrarlo. Y qué si lo hago?? Acaso no me gusta?? De verdad creemos que cuando nuestros pequeños bichitos se conviertan en monstruitos adolescentes llenos de acné van a querer que los cojamos en brazos y los llenemos de besos??? En serio?????

Mi pequeño erizito tiene hoy dos años, y lo llevo en brazos todo el tiempo que me da mi realísima gana. Mi madre, teniendo mi hijo apenas un mes, y atendiendo a la tan manida frase de "lo vas a malacostumbrar", me miró a la cara y me dijo: "esa señora va a ir a tu casa a coger al niño cuando no quiera estar en su cuna, no verdad?, pues haz con el niño lo que tú sientas, y quieras, no lo que te digan los demás, y cógelo en brazos todo el tiempo que te de la gana, que bebés son sólo una vez". Las madres siempre tiene la razón. Y siguiendo su consejo sigo llevando a mi hijo en brazos todo el tiempo que puedo, pero sus dos añitos ya van pesando, y a mi fisio la estoy haciendo rica.

Mi marido y yo hemos usado la mochila portabebés desde que nació prácticamente. Después, cuando ya no cabía, nos pasamos al suppori (luego os explico que es esto con un nombre así jiji), y ahora, que tengo los hombros que ni Michael Phelps, nos estamos planteando pasarnos a una mochila tula toddler. Que queréis que os diga, el porteo me encanta, y me favorece enormemente continuar con la lactancia sin molestarme en pararme en un banco. Y de mi erizo no os digo nada. A él, eso de ir en brazos de mamá o papá, pero con sus brazitos en libertad, y pudiéndose enganchar a su tetita sin que nadie le moleste, mmmm para él es lo más de lo más.

Así que sin enrrollarme mucho más, hoy venimos a hablaros del PORTEO!!

¿Qué significa portear?
         Llevar a los niños en brazos con un pañuelo o algo que los sujete bien
         Los niños se han llevado encima de las personas mayores mientras no caminaban de toda la vida.
         El porteo es, sin duda, una de las maneras más efectivas de generar vínculos de apego entre la madre y el bebé.
         ¿Qué mejor que un abrazo continuo, besos todo el rato y muy pegaditos a su mamá?
         Los bebés que son porteados lloran menos, duermen mejor, tiene digestiones más fáciles
         ¡Claro que se acostumbran a estar en los brazos! La pregunta sería, ¿qué tiene de malo acostumbrarse a que una madre te bese y abrace todo el rato? 
         ¿Por qué esa manía con no coger en brazos a los niños? No sólo es bueno, es indispensable, es lo natural. 
         Hagamos caso al instinto y cojamoslos en brazos
                 Resultado de imagen de porteo

¿Cómo portear?
         Hacerlo de la manera correcta. Cuando se portea a un bebé hay que tener claro estos conceptos:
-Si lo porteamos erguido tiene que estar sentado sobre su culete y no haciendo peso sobre sus genitales.
-La espalda debe estar en forma de c, posición fetal.
                Resultado de imagen de porteo

Hay varios tipos de porteo:

MOCHILA

         Las hay de muchas clases, pero lo recomendable es buscar las mochilas ergonómicas que respetan la posición natural del bebé.
         Que sea liviana, que reparta adecuadamente el peso del bebé y que sea fácil de colocar.
         Se llevan al frente o en la espalda y algunas permiten la opción de llevarla en las caderas. También incorporan, la mayoría, un soporte para la cabeza del bebé para que pueda ser usada dese el nacimiento. Hay algunas que incorporan un reductor especial para recién nacidos.
         Encontrar una en la que el bebé vaya sentado y no con las piernas colgando.
         La ventaja de la mochila es que es uno de los portabebés que más tiempo son utilizados y que por lo general son los más aceptados por los papás. Gracias a sus tiras regulables la misma mochila puede usarla papá o mamá.
         Dentro de las mochilas, encontramos los tipo baby, para cuando son más pequeños, y los tipos toddler, para bebés de 2 a 5 años.
         La desventaja, que ocupa demasiado espacio y que en ocasiones son muy engorrosas de colocar sin ayuda.
                    
                    Resultado de imagen de MOCHILA PORTABEBE
Resultado de imagen de MOCHILA PORTABEBE ERGONOMICA VS


MEI TAI

         El Mei Tai es un tradicional método asiático para cargar al bebé inspirado en las madres chinas que trabajan el campo con sus bebés cargados a sus espaldas.
         Consiste en un rectángulo de tela con cuatro tiras en sus extremos que pasan por los hombros de la madre y por la cintura y que pueden anudarse de diferentes formas según la edad del niño y cómo queramos cargarlo.
         Se puede colocar sobre el pecho de la madre, en la espalda o de lado sobre las caderas. La clave está en aprender la técnica para colocarlo y anudarlo correctamente para evitar que el bebé se deslice mientras caminamos.
         Está indicado desde el nacimiento (si el mei tai incorpora un soporte para la cabeza) o a partir más o menos de los tres meses, cuando el bebé tiene control sobre su cabeza, hasta los 16 kilos de peso.
         Una de sus ventajas es que el mismo Mei Tai permite ser usado por mamá y papá. No hay tallas, simplemente se regula con los nudos.

                                     Resultado de imagen de MEI TAI


POUCH O SLING

         Consiste en una banda de tela cosida en forma de tubo sin ganchos, ni anillas, ni requiere de nudos para sujetarse. Es, por lo tanto, uno de los sistemas más fáciles de colocar para quienes no son amigos de las técnicas de anudado.
         Se coloca sobre un hombro y permite llevar al bebé en posición fetal cuando es recién nacido y luego semi-sentado o sentado, dependiendo de la edad del pequeño, tanto en el frente, en la espalda como sobre una cadera.
         El pouch o sling se puede usar desde el nacimiento hasta los 15 kilos o el peso que el fabricante indique según la composición del tejido.
         La ventaja es que ocupa muy poco espacio, es muy fácil de poner y quitar y permite amamantar al bebé sin que nadie se entere. La desventaja es que el tallaje depende de las medidas de cada persona y posiblemente mamá y papá no puedan usar el mismo pouch (un ejemplo de ellos es el mencionado anteriormente, SUPPORI).
                         Resultado de imagen de pouch o sling

BANDOLERA DE ANILLAS

         Es un trozo largo de tela en cuyo extremo incorpora una anilla que permite ajustarla a la medida que deseemos. Se coloca sobre un hombro y permite llevar al bebé hasta en seis posiciones diferentes desde que nace hasta alrededor de los tres años.
         El niño puede ir acostado cuando es pequeño y sentado cuando es algo mayor ya que gracias al ajuste de la anilla la tela se adapta perfectamente brindando apoyo a la columna vertebral del bebé y comodidad al porteador.
         También puede cargarse al bebé al frente como en la espalda o en las caderas.
         Como ventaja, que puede utilizarla tanto mamá como papá ya que se regula mediante el ajuste de la anilla. Como desventaja, aunque es muy sencilla de colocar, la anilla puede resultar un inconveniente a la hora de ponerla y quitarla.
                              
                          Resultado de imagen de BANDOLERA DE ANILLAS

FULAR

         El fular imita el sistema tradicional utilizado en Perú y Bolivia para cargar al bebé. Consiste en un largo trozo de tela de aproximadamente cuatro metros y medio de largo y un metro de ancho que se anuda para llevar al bebé en infinidad de posiciones y posturas posibles. 
         Es el portabebé más versátil.
         Es indispensable aprender las diferentes técnicas de anudado del fular. Éste se puede usar en el frente, en la espalda o en el costado. Está tejido en sentido diagonal de forma que al estirarse la tela el nudo no se desplace.
         Es apto para bebés desde que son recién nacidos, incluso es ideal para prematuros porque van perfectamente pegados al cuerpo de mamá o papá, hasta niños de hasta aproximadamente 18 kilos.
         La ventaja es que se adapta a múltiples posiciones para llevar al bebé como más cómodos se sientan ambos. Además, es el portabebé más económico de confeccionar.
         La desventaja es que hay que aprender las diferentes técnicas de anudado.
                           Resultado de imagen de fular portabebes


CAMISETA PORTABEBÉ

         Se trata de camisetas ideadas para portear a tu bebé en contacto piel con piel, además de poder servir como camisetas de lactancia. 
         La mejor manera de practicar el método madre/padre canguro.
                       

                                  Resultado de imagen de camiseta portabebe

PORTEO Y LACTANCIA

         No cabe duda que el porteo en sí favorece una lactancia segura y eficaz.
         En algunos sistemas de porteo, el bebé se adapta a nuestro cuerpo de tal forma que puede ir mamando mientras caminamos por la calle o hacemos cualquier actividad.
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 Cualquiera que sea el tipo de portabebé elegido, lo más importante es que tanto tú como tu bebé os sintáis cómodos y encontréis en él una forma placentera de estar en contacto mutuo. Así que como siempre os decimos, oídos sordos a comentarios absurdos, y disfrutad, disfrutad mucho!!


                                  Resultado de imagen de porteo





miércoles, 19 de octubre de 2016

MI NIÑO NO ME COME....

Cuantas y cuantos de nosotras y nosotros hemos dicho esto, eh?? Sí, sí, no os escondáis, absolutamente todo ser viviente del planeta, y la galaxia, que tenga hijos, ha dicho alguna vez esa frase....

Y es que ahora, que los pequeños bichitos sueltan la teta, aunque sea un poco, y cogen la cuchara, es cuando nos damos cuenta de lo a gustito que estábamos cuando solo comían teta.

Ahora llega el momento de las rabietas, los giros de cara, los labios fruncidos, los dientes (si los tienen, y si no también) apretados, y los escupitajos de comida que llegan al techo.

Sí queridos, llega el momento de la alimentación complementaria.... Pero como este es un tema largo, si queréis lo partiremos en dos: la alimentación complementaria como tal, y una cosa nueva, o vintage, con un nombre muy rarito el "baby led weaning" (eennn???).

            Resultado de imagen de alimentación complementaria bebe dibujos
       
Comenzamos....

         Cuando la leche materna deja de ser suficiente para atender las necesidades nutricionales del lactante hay que añadir alimentos complementarios a su dieta. La transición de la lactancia exclusivamente materna a la alimentación complementaria abarca generalmente el periodo que va de los 6 a los 18 a 24 meses de edad.
         El objetivo de que empiece a comer a los 6 meses es empezar a complementar a la leche materna. No sustituir, en realidad, sino complementar.
         Seguir dando el pecho a demanda, pero empezar a darles comida con una cuchara para que empiecen a probar nuevos sabores, a conocer nuevas texturas, a masticar y a ir comiendo, ya, los alimentos que comerá el resto de su vida.
         Aún así, hasta los 12 meses, lo primero que se recomienda dar al bebé es la teta. Se debe ofrecer primero el pecho, y después los alimentos complementarios.
         Como la leche artificial no tiene las mismas propiedades que la leche materna, se permite en muchas guías que los bebés que toman biberón empiecen con la alimentación complementaria antes, entre los 4 y los 6 meses. Nunca, nunca, se debe empezar antes de los 4 meses.


Bien, hemos empezado a darle comidita como la de papá y mamá, pero ¿qué le damos?, ¿es mejor el puré, o quizás trozitos pequeños? Aquí es donde entra en juego el BABY LED WEANING

                               Resultado de imagen de bebes comiendo dibujos
      Es la “introducción de la alimentación complementaria guiada por el bebé”, o lo que es lo mismo, que el niño adopte la alimentación complementaria en base a sus necesidades y gustos.
      Se trata de poner a su alcance alimentos adecuados a nivel nutricional y variados, para que ellos elijan qué y cuánto comer.
      Estas recomendaciones nacen de Gill Rapley, nutricionista y directora adjunta de la Iniciativa de Hospitales Amigos de los Niños (IHAN) de UNICEF, en Reino Unido.
      Según Rapley, y acogiéndose a las recomendaciones de la OMS , lo ideal es iniciar la alimentación ofreciendo al bebé alimentos de fácil masticado, que formen parte de la dieta de los padres. De esta manera, al comer lo mismo, son menos propensos a tener problemas de aceptación de sabores y de texturas con la comida.

¿Cuándo puede un niño empezar a tomar sólidos?
  •            En cada niño es diferente. En torno a los 6 meses es el momento en el que se suele recomendar que se inicie la introducción de la alimentación complementaria al pecho.

                    Pero si no tiene dientes, ¿cómo va el niño a masticar la comida?
  •        Masticar es algo que hacemos con las muelas. Con los dientes se corta, con las muelas se muele o mastica. Por eso, cuando se escoge el BLW, no se recomienda dar cualquier cosa al bebé. Mientras no tenga dientes con los que masticar debemos ofrecerle sólo alimentos que puedan deshacerse con facilidad.
  •       Según Rapley, lo ideal es empezar con trozos grandes, del tamaño del puño del bebé y un poquito más, ya que ese poquito más será lo que el bebé comerá, roerá o chupará. Alimentos ideales para empezar pueden ser la pera o la manzana, cortadas en rodajas muy finas, que si están un poco maduras las puede deshacer bastante bien en la boca, el brócoli, ya que agarran el tallo con su mano y comen el resto, un filete pequeño de carne, una zanahoria hervida, patata….
  •       Se empieza en algunas tomas del día a ofrecer al niño alimentos que puedan “masticarse” con la encía o deshacerse con la lengua, antes o después del pecho. Cuando mejor lo acepte el niño. Si lo hacemos antes del pecho, siempre después podemos ofrecerlo (y es lo mejor si queremos mantener la lactancia materna).
  •       La idea es dejarlo que juegue con ella. La habremos preparado en trozos que el niño pueda manejar con facilidad.  La curiosidad innata de los niños hace que tiendan a llevárselo todo a la boca. Vernos comer a nosotros (si es posible, alimentos similares) hace por imitación otra parte del trabajo.

      El objetivo y gran ventaja de este método es conseguir que el niño sea un comedor activo: Que desde muy pequeño sea capaz de comer por sí mismo. Y que su relación con la comida sea de curiosidad e integración en la conducta de los demás.
  •  Muchos padres se quejan de que su hijo puede estar una hora con el plato delante sin comer. Que si no le dieran el niño se moriría de hambre. Iniciar de forma precoz esta forma de alimentación evita muchos de estos problemas.
  • Los niños aceptan mejor las diferentes texturas y sabores, tienden a aceptar más alimentos y sus menús son muy similares a los de los adultos. Esto es porque además de fijarse en el sabor, la temperatura y la textura por la boca, pueden fijarse en el color, en la forma, en el tacto, en la temperatura al tocarla, en qué pasa cuando golpeas los alimentos contra la mesa, etc.
  • Comen a demanda, la cantidad que sus cuerpos les piden y eligen el alimento que puede aportar más según los requerimientos nutricionales de cada momento.
  • Como es su propia curiosidad la que les lleva a probar alimentos, son ellos los que deciden qué y cuánto comer, qué les gusta y qué les disgusta y se fomenta la autonomía de los bebés.
  • Al comer los alimentos por separado, conoce todas sus características de forma aislada, así el plátano sabe a plátano, los guisantes a guisantes y la carne a carne.
  • Pueden comer lo mismo que comen los adultos, por lo que puede sentarse a la mesa con ellos y ser uno más.
  •  Los niños no se acostumbran a las papillas y triturados (textura que los adultos no solemos utilizar) y se aprovecha el periodo que hay entre los 6 y los 12 meses en que tienen una curiosidad impresionante hacia cualquier cosa. 
  • Aún teniendo todas estas ventajas, no es aconsejable seguir esta fórmula si el niño tiene antecedentes de intolerancias alimentarias, u otros problemas relacionados con la alimentación
     Una vez decidido que técnica vamos a escoger, llega el momento de aprender como empezar....
   
                  A partir de los 4 años puede comer de todo.

      Frutos secos no antes de los cuatro años (peligro de atragantamiento).
      Desde los 2 años pescado azul grande (atún, bonito, caballa). Antes no por su contenido en metales pesados.
      Desde los 2 años Chocolate: Rico en histaminas, favorece la aparición de alergias y la mayoría cuando lo prueban les gusta y pasan a tomarlo con frecuencia.
      También desde los 2 años Marisco: Puede causar alergias intensas.
      Desde el año: Leche de vaca entera si previamente ha tomado otros lácteos procedentes de la vaca sin problemas.
      El resto de alimentos pueden empezar a darse prácticamente desde los 6 meses

         Solo hay una regla: ofrecer los alimentos de uno en uno.
         El primer día que le ofrecemos algo de comer solo le podemos dar una cosa (que llamaremos ingrediente A). El primer día le damos el ingrediente A. Lo prueba, lo escupe, lo vuelve a probar, traga un poco, tira otro poco al suelo, se restriega el resto por la cara, la ropa y el pelo, prueba otro poco, traga otro poco y pide teta (esto sucederá casi siempre... que después de comer, por poco o mucho que coma, pedirá teta).
         Durante la tarde y la noche observamos que todo esté bien: que no vomite, que no tenga diarrea, que no haga eccemas o ronchas en la piel, que no se le hinchen los párpados, la lengua, etc. (si se hincha algo, corriendo para el hospital).
         Hay que dejar pasar unos días entre un alimento nuevo, y el siguiente en añadir. Entre 2-7 días (si es una semana mejor).
         Lo recomendable es ofrecerlo en la hora del desayuno o en la hora de la comida, porque así, si hay una reacción alérgica, no ocurrirá por la noche.
         Además, interesa hacerlo en momentos en que estemos mamá o papá, para poder prevenir y tratar posibles reacciones alérgicos, o una posible visita al hospital.

       Resultado de imagen de bebes comiendo dibujos

Y RECORDAD ESTOS SABIOS CONSEJOS:
      Que vuestro bichito coma bien significa, entendiendo desde el principio, que la cantidad de comida que el niño debe comer es variable y que si le dejamos escogerla se auto-regula mejor de lo que lo haríamos nosotros calculando.
      Que no debemos pelear con el niño ni presionarlo para que coma más. Y que la variedad es la que nosotros debemos controlar para escoger los alimentos que le ofrecemos y los que no, buscando que tenga una dieta sana y cada vez más variada.

Cuesta, cuesta muchísimo entender que no estamos aquí para engordarlos, sino para hacerlos felices. Y es absolutamente cierto, que cuando comprendemos que cada niño es diferente, que cada día es distinto, nos daremos cuenta que nuestro hijo come mucho mejor. Creedme, casi me cuesta la cordura llegar a esta afirmación, y todavía, a veces, en la soledad de mi conciencia de madre hiperprotectora, miro a mi hijo y pienso "qué delgado está, ese niño es de su edad y es dos veces él, si es que no me come". Sí, somos así, hay que aceptarlo. Pero de verdad os prometo, que tanto vuestros pequeños chefs como vosotros mismos seréis mucho más felices si llegáis a ese punto en el que penséis "si yo no me como todos los días un plato hasta arriba de potaje, ¿por qué lo obligo a él?".

A comer pescaitos, que es casi casi la hora de la merienda jijiji 




lunes, 3 de octubre de 2016

CONCILIACIÓN Y OTROS CUENTOS CHINOS....

Cuando nos adentramos en el maravilloso mundo de la maternidad todo se vuelve dulzura y amabilidad. Todo parece color de rosa y cuando estornudamos nos salen corazoncitos por las orejas....hasta que llega la incorporación al trabajo....ta ta ta chan!!!!!

Sí queridos, el mundo no está hecho para que los padres decidan trabajar, y ser, eso, padres. No hay ningún trabajo al que puedas decir "mire voy a entrar un pelín más tarde porque tengo a mi hijo engamchado a la teta". Eso parece un chiste verdad?? Pero pensad por un momento, todas las guías médicas especializadas en la materia dicen que hay que mantener lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses de vida, y a demanda mínimo hasta el año de edad, ofreciendo primero el pecho, y después la alimentación complementaria. Vale, perfecto, entonces que alguien me explique por qué el permiso por maternidad dura 16 semanas!!!!!!!

Ufff, este tema me pone de los nervios. Sí, somos unos padres rebeldes, queremos criar a nuestros hijos y ascender en nuestro ámbito laboral. Ohhhh my God pero qué dices????? Pues sí, quiero eso, mátenme....

No, no es imposible. Lo primero debería ser que cambiaran las leyes, pero como eso, en este país, lo vemos difícil, vamos a daros otros truquitos....vamos allá.

          La reincorporación al trabajo suele estar acompañada de sentimientos encontrados. Por un lado, la satisfacción de volver a trabajar y, por otro, el de la preocupación por dejar al bichito con otra persona y la duda de si podremos compaginar el trabajo y la lactancia.

          Muchas madres en el mundo lo hacen. Por esto, es bueno contactar con un grupo de apoyo a la lactancia o de madres para compartir inquietudes, preocupaciones y trucos para resolverlas.

¿Voy a volver a trabajar, cómo me organizo?

          Va a depender del tipo de trabajo y lo lejos que esté, de la edad del niño y de si puede haber ayuda por parte de otros familiares, de las posibilidades económicas, etc...
      - Según el convenio de trabajo, a veces se pueden juntar todas las horas de permiso de lactancia en jornadas completas. Así se puede retrasar la vuelta al trabajo.
      - En otros casos, se puede pedir una reducción de jornada laboral o excedencia del puesto de trabajo para poder seguir dando el pecho. El gran inconveniente que tiene esta opción es que lleva a una reducción o pérdida del sueldo.
      - Si se puede llevar el niño al trabajo y tenerlo allí, se podrá seguir dando el pecho sin muchos problemas. Desgraciadamente, no hay muchos casos en que se pueda hacer esto.
      - Otra opción es que el cuidador pueda llevar al niño al lugar de trabajo para que la madre le dé de mamar allí mismo o bien que la mamá salga del trabajo y se acerque donde está el niño a la hora de lactancia o en sus descansos.

    - Quizá la opción más común sea la de extraerse la leche y conservarla para que la persona que cuida al niño se la dé cuando la madre no está.
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“Biblioteca de leche”
  ¿Cómo extraer la leche?
          La extracción de leche se puede hacer de forma manual o con un aparato llamado sacaleches, que puede ser manual o eléctrico.
          Si hay que hacer varias extracciones al día es mejor uno eléctrico por su comodidad.
          Hay que lavarse siempre las manos con agua y jabón antes de la extracción de leche, sea de forma manual o con sacaleches.
          También es bueno hacer un pequeño masaje suave en el pecho antes de la extracción. Esto ayuda a que la leche fluya mejor.
   ¿Cuándo extraer la leche?
          Cada mujer decidirá cuándo lo hará. Muchas mujeres dicen que sacan más cantidad de leche a primera hora del día. Cualquier hora puede ser buena.
          Es importante que la madre esté relajada y no se sienta forzada a extraer una cantidad determinada. Lo puede hacer una o varias veces al día. Eso dependerá de la cantidad de leche que se pueda extraer o de la que necesite para dejar a su hijo.
          En los primeros días la cantidad suele ser mucho menos de lo esperado. Eso es normal, poco a poco la cantidad será mayor. Una forma de obtener más cantidad de leche es extraer antes de la toma del niño y ponerlo a mamar después de la extracción. De esa forma recibirá las calorías que necesita y se producirá más cantidad de leche. También es una buena opción extraer la leche de un pecho mientras el niño mama del otro. La leche fluye mejor y en mayor cantidad.
          También hará falta la extracción en el lugar de trabajo, sobre todo si la madre pasa muchas horas lejos de su hijo. En ese caso cualquier momento puede ser bueno, dependerá del tiempo que se tenga.
¿Cuánta leche extraer?
          Lo ideal es ir haciendo un pequeño banco de leche antes de volver al trabajo, sin tener en cuenta las horas que se vayan a pasar fuera de casa. Eso dará tranquilidad a la madre y a las personas que cuiden al bebé.

          Si la madre va a pasar muchas horas fuera de casa comenzará a extraerse leche antes e intentará hacer un banco de leche lo más grande posible.

          Si el bebé sólo va a necesitar una o dos tomas al día, puede almacenar leche unas semanas antes y congelarla. Después irá extrayendola cada día y refrigerándola para darla al día siguiente.

¿Cómo conservar la leche?
          Se pude conservar la leche en envases de plástico o cristal aptos para el consumo alimentario y que tengan un cierre efectivo. También hay bolsas. Deben estar bien lavados con agua y jabón y bien aclarados. También se pueden lavar en el lavavajillas.
          Lo mejor es conservar la leche en envases pequeños 60-100 ml para no desperdiciar leche. Rotular los envases con la fecha y usar antes los más antiguos.Para llevar la leche extraída desde el trabajo a casa se puede usar una neverita de mano.
Resultado de imagen de leche materna conservación
 ¿Cómo descongelo la leche?
          Se puede descongelar sacándola del congelador media hora antes de su uso para que descongele a temperatura ambiente. Es mejor que no se haga directamente al fuego ni en el microondas. Si no se va a usar en el momento también se puede descongelar en la nevera pero hay que tener en cuenta que se debe usar en las siguientes 9 horas.
Resultado de imagen de leche materna conservación

Ahora mamá está en el trabajo…
¿Quién cuidará al niño?
          Cuanto más individualizado sea el cuidado del niño será mejor para él. Por eso después de su madre, la mejor opción es la del padre. Después, un familiar cercano o una persona de confianza.
          Otras veces será una guardería la que se ocupe del cuidado del niño. En todos los casos es recomendable que la persona que vaya a ocuparse del cuidado del niño se familiarice con él y también con el manejo de la leche materna y la forma de ofrecérsela (vaso, cuchara, biberón...).
¿Tengo que entrenar al bebé antes para darle mi leche u otros alimentos?
          No hay que entrenarlo para que se acostumbre a tomar la leche con biberón u otros métodos ni otros alimentos.
          La madre no debe dejar de darle tomas de pecho para este entrenamiento. Es recomendable que mientras esté con su hijo le dé el pecho a demanda. El bebé tomará la leche extraída u otros alimentos sin muchos problemas cuando la madre no esté.
          Sí es importante que los cuidadores se familiaricen con el bebé y también con los métodos que vaya a usar para dar la leche de la madre extraída u otros alimentos.

 ¿Qué darle de comer mientras trabajo?
          Si el niño es mayor de 6 meses ya se le puede dar además de leche la alimentación complementaria (carnes, verduras, frutas, cereales...). La madre puede darle el pecho todo el tiempo que está con el bebé. Cuando esté trabajando la persona a su cargo le puede ofrecer estos alimentos. Con ello son menos tomas de leche que hay que dar cuando no está la madre. En caso de tener leche fresca y congelada hay que usar antes la fresca y dejar la congelada para emergencias.
          Si el niño es pequeño, menor de 4 meses, sólo se le puede dar leche como alimento. Según las horas que la madre esté separada de él el número de tomas será mayor o menor. Hay que tener en cuenta también que hay niños que prefieren no tomar nada mientras no está su madre, rechazando lo que le ofrecen y luego compensa cuando la madre vuelve.
          En el caso de tener entre 4-6 meses, aunque la recomendación de comenzar con alimentos complementarios es a los 6 meses, se puede valorar incorporarlos antes y ofrecerlos mientras la madre no está.


Así que vamos, que no se diga!! Somos padres, somos trabajadores, y luchamos por lo que queremos!!